

Por culpa de unos italianos que se cruzaron en nuestras vidas, nos conocimos comiendo atún . Dos almas descarriadas empezaban un camino juntos compartiendo las cosas que más les gustaban.
Nuestro 2018 estuvo marcado por la decisión de compartir nuestras vidas bajo un mismo techo. Pese a las dificultades , el conocernos más y aceptarnos tal como somos hizo crecer el cariño y las ganas de enfrentar las situaciones que se nos vayan poniendo por delante.
La familia creció pronto: Gobolina y Sálima
llegaron para desordenar nuestras vidas aún más.
2019 fue un año de viajes, de familia, de conciertos, de locura... Sobrevivimos a la carretera de la muerte y a muchas otras cosas más... ¡algunas terroríficas ! Pero todas nos hicieron seguir con la idea de donde sea, ¡pero juntos!
2020 empezó de lujo, fin de año en Valparaíso, carnavales en Uyuni... pero todos sabemos que este año dejó de ser un año normal y nos tocó adaptarnos, a todos. Así que lo que nos queda es seguir adelante, pero juntos.
¡Esta cuarentena nos ha hecho pasar LA GRAN PRUEBA! Si nos hemos aguantado en estas circunstancias, ¿a qué esperamos para dar el gran paso? ¡ NOS CASAMOS
!
¡Hemos tenido un bebé! Se llama Mario León, pesó 3.020 kg y midió 49 cm. La espera ha sido larga pero ha merecido la pena. Comienza nuestra nueva vida .